¿Por qué? Así separado, por qué, a secas...esa pregunta suena a interrogación, a búsqueda, a incertidumbre. Muchas veces preguntamos por qué, muchas veces sabiendo la respuesta, muchas veces queriendo, muchas veces odiando.
A veces preguntamos el por qué, por decepción, por por no dejar, por la simple sensación de dejar todo en su lugar, porque ya no hay esperanza, por la mera sensación humana de poner las cuentas en cero y poder empezar de nuevo.
La verdad es que estas dos palabras nos llevan a una profunda reflexión de la conducta humana. Cuánto ladrones, asesinos, rompimientos conllevan estas dos palabras: Por qué. Y es que preguntar no es malo, de allí los grandes descubrimientos, el avance de la ciencia, el paso de un estadio del desarrollo de la humanidad a otra, por qué.
Ahora al final del camino tomas una decisión y decides esperar hasta el último momento, cuando ya me voy, sin darme chance a reflexionar, a debatir, a quedarme un poco frente a ti, para que me digas la razón de tu actitud. ¿Por qué lo haces? Esa era tu carta para este juego, dejarme sin habla, yo presentía pero no quería creerlo, no pensaba que fueras así, no pensaba que tu actitud llegara a tanto, es más, ahora siento tu actitud a traición, a mi, a ti, a lo nuestro, a la buena fe, a lo posible.
Si crees que me esto es lo mejor, si piensas que es la mejor jugada y que el ganador se lo lleva todo, te lo acepto. No puedo hacer nada porque no tengo cartas escondidas, siempre lo he dicho de frente, lo que tengo, lo que soy y lo que necesito. Sólo pido lo justo, lo imprescindible, lo legal, tal vez fue mi error. Yo no quise ir más allá, no se si por temor, por ignorancia, por dejarlo todo igual, para que no sintieras que yo era una carga para ti, me equivoque.
Me amarraste, me juzgaste y no me das oportunidad para defenderme, eso lo llamo traición. Me mostraste la playa cuando lo tiburones ya estaban sobre mi y no hubo chance de nadar. Claro hubo cómplices, aquellos que no decían nada y que lo sabían todo, aquellos que tal vez se aliaron contigo con la intención de sacar provecho de este pacto roto, y aunque lo sabía, no pensé que llegaran hacerlo, tu sabes, cosas de la vida, yo creí en ti.
Ahora me voy, y llega el viernes, cada quien con cada cual sacan su cuenta, ya ya saqué la mía y creo que tu también la sacaste, tal vez antes que yo, tal vez me mirabas, leías mis cartas, veías mis intentos y te callabas, tal vez me dabas la oportunidad para que te descubriera, pero no fui capaz, llega el viernes y me sueltas y me liberas, sin armas, desnudo y no tendré otra opción que volver a ti.....
La verdad que este Gremio Docente está peor que los Sindicatos, se burlan de sus agremiados con esta publicación que lo que da es pena y hasta ridícula su interpretación......
ResponderEliminarRidiculossss ¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!!
ResponderEliminar